domingo. 07.07.2024

Fernando Molina, presidente del ISE: “Queremos que la Ruta de la Seda sea la primera Ruta Turística Inteligente transnacional”

El año pasado se presentó en Madrid el Instituto Seda España (ISE), una entidad privada que ha nacido con el propósito de estrechar los lazos entre el medio centenar de países por donde transcurren los trazados marítimos y terrestres de la histórica y de la Nueva Ruta de la Seda. "Este acercamiento puede abrir múltiples oportunidades, entre otras, el desarrollo del turismo cultural que, en el caso de España, cuenta con Valencia y otros municipios como ciudades de destino del mítico recorrido", destaca Fernando Molina, presidente del ISE.
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Fernando Molina, presidente del Instituto Seda España (ISE).

La Ruta de la Seda une culturalmente a países de tres continentes ¿Qué puede aportar desde el punto de vista turístico la Nueva Ruta de la Seda a los destinos?

La Ruta de la Seda aporta a los destinos la conexión con más de 50 países, una ruta de casi 9.500 kilómetros, desde España hasta Filipinas y también, sobre todo, una conexión a través de la ruta del mar, que dio la vuelta al mundo en un determinado periodo de la historia y que emprendió nuestro país. Eso es una oportunidad de visibilidad para España muy importante.

En España, ¿cuáles son las principales ciudades por las que pasaba la antigua Ruta de la Seda?

En España, claramente es el sudeste del país la región con más tradición sedera. La seda entra en España por el norte de África, la traen los persas, y en su momento llega a través de Sevilla, Granada, Murcia y Valencia. Por el clima son esas las zonas donde se podía cultivar la morera, y eso hace que todo el sudeste español desde esa época hasta la actualidad pase por diferentes periodos, y especialmente Valencia tiene una época muy floreciente de tradición sedera que va desde el 1.400 hasta el año 1.800. A partir de ese año y a consecuencia de una crisis muy importante por una enfermedad que infecta a los gusanos la industria de la seda y el cultivo de la morera desaparece y origina un cambio radical en el modelo productivo.

¿Cómo afecta la desaparición del cultivo de la morera en Valencia?

A partir de ahí, se produce, como digo, un cambio en el modelo productivo. Valencia no tenía naranjas, casi todas las tierras se dedicaban al cultivo de la morera, y a partir de ese momento todo cambia y aparece el cultivo de la naranja y del vino en poblaciones como, por ejemplo, Requena. La seda se olvida entonces. En Valencia y en el resto de España hemos vivido más de 150 años de espaldas a nuestra tradición sedera, hasta que hemos vuelto a poner en valor todo nuestro patrimonio histórico, económico y cultural que se desarrolló en España durante más de 400 años alrededor de la seda.

Y actualmente está presente y viva en los trajes de valenciana o en el Colegio de Arte Mayor de la Seda en Valencia, que tiene uno de los archivos más importantes de la época en la que la seda era una industria floreciente y todo ese patrimonio es vendible, hay un tipo visitante que busca en la cultura un diferencial.

¿Cómo están apoyando las autoridades turísticas valencianas por ese antiguo patrimonio cultural e histórico de la región? ¿Lo están respaldando de alguna manera desde el punto de vista turístico?

Sí, por supuesto. El actual secretario autonómico de turismo de la Comunidad Valenciana, que ha renovado el cargo, Francesc Colomer, en su apoyo a la promoción de la Ruta de la Seda ha sido ejemplar. De todas las comunidades autónomas implicadas en la ruta de seda en España, la Comunidad Valenciana ha sido la que más esfuerzo ha hecho por dar a conocer esta tradición y, de hecho, ya hay muchos productos turísticos que en Valencia se han puesto en valor.

Lo estamos desarrollando mucho en talleres y en turismo experiencial, y lo que nos gusta mucho es hablar de “silk experience”, y “seda viva”.

Actualmente, existen circuitos que llevan a visitar la seda, museos que tienen un área concreta dedicada a la seda, pero lo que nosotros siempre decimos es que no es un producto exclusivo y único, hay que saberlo aliar o tejer con otros productos que pueden ser complementarios, como la visita a la iglesia de San Nicolás en Valencia, el Colegio de Arte Mayor de Valencia o la visita a otro tipo de turismo de naturaleza. De esa manera la seda sirve para dinamizar otros productos-

Nosotros premiamos un concepto que denominamos “Municipios Creativos” que son aquellos que a través de la seda inventan productos turísticos.

El Instituto Seda España promueve una verdadera Ruta de la Seda nacional y transnacional. A veces, las autonomías en eso trabajan de forma individual, pero es como si el Camino de Santiago se trabajara individualmente por cada comunidad por donde transita. Es necesario darle una visión nacional, más global, de Ruta en su conjunto para ponerla en valor.

El Instituto Seda España tiene su sede en Madrid. ¿Hay que implicar a más comunidades autónomas y a más organismos nacionales e internacionales en el desarrollo de la Nueva Ruta de la Seda en España?

Sí, aunque el origen de nuestras actividades tiene lugar en Valencia, hace un año aproximadamente consolidamos nuestra presencia en Madrid, y lo que queremos es que el Instituto Seda España promueva una verdadera ruta nacional y transnacional. A veces las autonomías en eso trabajan de forma individual, pero es como si el Camino de Santiago se trabajara individualmente por cada comunidad por donde transita. Es necesario darle una visión nacional, más global, de Ruta en su conjunto para ponerla en valor.

¿Han mantenido conversaciones con otras comunidades autónomas para conseguir esa implicación en la consecución de la ruta de la seda española?

Sí, desde luego. Hemos estado en Murcia tratando esta cuestión con el responsable de promoción turística de Murcia. Lorca, por ejemplo, es un destino turístico que atrae a mucha gente por su Semana Santa, pero que cuenta también con escuelas de bordados. Luego vimos en la huerta murciana como también se rinde homenaje a través de su folklore, sus tradiciones y sus trajes a esta cultura.

Granada, por su parte, cuenta con las Alpujarras, con toda la historia de la salida de los moriscos de España y en Sevilla, especialmente, con la conexión a través de Manila con toda Iberoamérica, y ahí enlazaríamos de nuevo con la ruta del mar y con lo que supuso la seda para España.

Queremos ser líderes en tecnologías turísticas y en turismo inteligente y ser un modelo de referencia para el resto. Trabajar todos en una ruta común donde la seda sea el hilo conductor.

¿Cuáles son los principales objetivos del Instituto Seda España a corto plazo?

Uno de nuestros principales objetivos es conseguir lo que denominamos la “Silk Smart Route”, ser una ruta inteligente de referencia. Seríamos la primera ruta inteligente porque intercambiaríamos todas las áreas de información de unos países con otros. Al igual que ahora se promueven los destinos turísticos inteligentes, siendo Benidorm el primer DTI de España, nos gustaría que la Ruta de la Seda fuera la primera ruta de inteligencia turística transnacional, con la tecnología actual a través de apps y de otras plataformas un visitante puede estar en la Real Fábrica de Tapices de Madrid y a la vez conectar con espacios dedicados a la seda en Turquía o Samarkanda.

El Instituto Seda España quiere tener una cobertura internacional en la que tuviéramos todos acceso a la información de Asia y a la información de Latinoamérica y ponerla en común. En octubre inauguramos la primera oficina del Instituto de la Seda en Latinoamérica, concretamente en Colombia, y ahora estamos preparando la apertura de una oficina en Manila (Filipinas).

Queremos ser líderes en tecnologías turísticas y en turismo inteligente y ser un modelo de referencia para el resto. Trabajar todos en una ruta común donde la seda sea el hilo conductor.

¿Hay empresas privadas que se hayan interesado en el desarrollo o en la promoción de la Ruta de la Seda en España?

Hay compañías navieras que se han interesado por la ruta del mar, para desarrollar un nuevo producto turístico a través de los cruceros que pueden conectar los puertos del Mediterráneo, con la India y otros países, en este caso de Asia.

Actualmente se está celebrando en Madrid la Cumbre del Clima COP25 ¿Cómo puede el Instituto Seda España influir en el desarrollo de propuestas para evitar en lo posible el cambio climático?

El Instituto Seda España, desde su inicio, aboga por convertir la Nueva Ruta de la Seda en una Ruta de Paz, proponiendo como método para conseguirlo el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. En la Exposición La Seda que se celebra en la Real Fábrica de Tapices y que organiza y desarrolla el Instituto Seda España, dedica una de las secciones de la misma precisamente a la relación de los ODS con la exposición, mostrando cómo participa en la observación y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, tanto el propio Instituto como la Eco-Granja de la Seda y la Real Fábrica de Tapices.

Con la intención de que esto sea conocido por los asistentes a la Cumbre del Clima, el Instituto Seda España , ha elaborado unos trípticos sobre la exposición en inglés donde se hace referencia a los puntos indicados  en esta información sobre los ODS y las tres entidades participantes en la Exposición La Seda “ Del origen al futuro por las rutas de la seda”, que se distribuyen en la sede de la Cumbre y en hoteles ocupados por participantes así como a la organización , para que incluya entre las visitas culturales recomendadas en Madrid, la Exposición La Seda en la Real Fábrica de Tapices.

Proyectos como el nuestro, que muestran al mundo La Nueva Ruta de La Seda como Una Ruta de Paz, modestamente creemos que son necesarios y necesita los apoyos para llevarlo a cabo.

Fernando Molina, presidente del ISE: “Queremos que la Ruta de la Seda sea la primera...